La Oscuridad de Marianne Curley

Tras un par de días perdida y totalmente traumatizada por haberme tragado los dieciséis capítulos de A Love to Kill para tener ese desastroso final (si yo ya veía que muy "pallá" no estaban los protagonistas, la verdad...) tenemos reseña nueva. Hoy vamos a hablar de el segundo libro de la tirlogía Los Guardianes del Tiempo de Marianne Curley. Anteriormente reseñé el primer libro, Los Elegidos, y ahora le toca el turno al segundo, titulado La Oscuridad. por cierto, no hay spoilers, o casi ninguno...

Enjoy!

Sinopsis:

Doce meses después de la muerte de su amado Marduke, la Diosa del Caos ejecuta su terrible plan de venganza, lo que obliga a Isabel y Ethan a contraatacar para preservar el curso de la Historia. Junto con Matt, los dos jóvenes se embarcarán en la aventura más oscura, peligrosa y trepidante que habrían podido imaginar, un viaje que los conducirá a través de increibles paisajes llenos de magia y misterio.

La oscuridad es una apasionante historia cargada de suspense e intriga que dejará a los jóvenes lectores esperando ansiosos la última parte de la trilogía.

Ha pasado un año desde lo sucedido en el primer libro. Ethan sigue igual que siempre, Isabel anda más colgada de Arkarian que nunca y Matt se ha unido a la pandilla chupiguay;vamos, que todo anda medianamente encauzado. Sin embargo, la Diosa Caos no ha olvidado lo que le hicieron a su amado Marduke, y decide vengarse de la única forma que puede: secuestrando a Arkarian y trastocando el pasado para que éste no llegue a nacer.

Desoyendo los mandatos de los altos mandos de los Guardianes, los cuales les prohibieron hacer nada al respecto, Matt, Ethan e Isabel se embarcan en una aventura donde tendrán que lidiar con lo desconocido, un lugar exento de luz, con criaturas peligrosas y nieblas que les harán enfrentarse a sus propias debilidades.

La única luz alumbrando el camino, será la de la lealtad y el amor.

Este volumen no tiene mucha vuelta de hoja, porque sigue la estela de su antecesor. Volvemos a encontrarnos con una narrativa fluida, escrita en presente, y alternando los puntos de vista, aunque ésta vez el lugar que ocupó Ethan es ahora de Arkarian, por lo que nos encontramos que los protagonistas principales de éste libro son Isabel y él.

Hay mucha aventura, algunos misterios, y sobretodo, ese típico amor adolescente totalmente light que me hace agradecer a los dioses haber pasado la edad del pavo hace ya unos cuantos años. y aunque los ingredientes son los indicados para obtener un gran resultado, la agitación de los mismo se hizo de forma tan infantil que no me sedujo en lo más mínimo.

Ya dije anteriormente que Arkarian era un personaje que me gustaba bastante, de hecho, era mi favorito, pero en este libro ha caído unos cuantos escalones y ya simplemente se queda en soportable. En La Oscuridad no habrá nada que ver de ese valeroso y sabio muchacho inmortal que nos cautivó. Su lugar es tomado por el espíritu de Sara Montiel, y se lleva gran parte del libro con ese "¿pero qué pasa?" que me pone de los nervios.

Isabel, desgraciadamente, no llega ni a gustarme. Esta chica a la que pudimos ver como una sanadora en potencia y con cierto autodominio de sí misma e independencia se convierte en una esclava del amorrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr. Medio libro se la pasa pensando en rescastar a Arkarian, y el otro medio rescatándolo.

En cuanto a Ethan, es un personaje invisiblae, porque está, pero no está. Y Matt, que cobra cierto protagonismo (más que nada porque el tercer libro está protagonizado por él) logró ponerme de los nervios con tanto ímpetu, tanto pesismismo y tanta cursilería de hermano protector. De verdad, es que yo soy Isabel y pido una orden de alejamiento. 

Por supuesto nos contramos con trabas, personajes nuevos, algún que otro secreto y bla bla bla, pero nada que desvíe a Isabel de su idea: Rescatar a Arkarian. lo curioso de todo es que aún no me explico cómo se pueden reconocer todos cuando se ven dentro de otros cuerpos nada más que por los ojos. Como no hay gente en el mundo con los ojos azules, como para saberse que es Ethan...

Otro tema en el que el libro falla es en el del supense. Se supone que cuando tienes secretos, y estos se revelan, tú debes poner la boca tipo pez boqueando fuera del agua y exclamar un ¡Joder! bien sonoro. Bueno, pues en La Oscuridad lo único que logras sacar es un gran bostezo, y esa típica frase de marisabidilla: ya lo sabía. 

No sé si es que la autora no nos veía con fuerza de voluntad suficiente como para soportar un poco de misterio, o es que es de esas que les cuesta mantener en vilo al lector hasta el final de los días, pero el caso es que me lo puso tan a huevo que terminé el libro con el único propósito de demostrarme que yo tenía razón. Ah, y la tenía.

Nota: 

En general, La Oscuridad es un libro intermedio que no tiene nada de especial: una historia de amor boba, dificultades varias, algo de aventura y mucho misterio cuyo desenlace se ve venir desde dos kilómetros. Decepcionante.

La Oscuridad fue publicado por Salamandra en 2004 y su precio es de 15.00 euros. Ya me queda reseñar el último libro, La Llave, que lo haré cuando vuelva a traumatizarme.

Hala, eso es todo por hoy. Ya saqué un poco el látigo a pasear, que me tenía harta con tanto lamento.

¡Nos leemos!