26 oct 2011

La mejor venganza de Joe Abercrombie

Siento la tardanza, pero he estado un poco ocupada con los niños y otras cosas, así que no he podido dedicarle tiempo al blog. Hoy os traigo un libro que me ha regalado un amigo -gracias, Alain- y que es pura fantasía épica, pero con un toque algo... singular. Su autor, Joe Abercrombie, es mundialmente conocido por la trilogía "La primera Ley", anterior a esta novela pero ambientada en el mismo mundo de fantasía. Dicho esto, comencemos, pues.

Enjoy! 


Sinopsis:

La guerra puede ser un infierno, pero para Monza Murcatto, la Serpiente de Talins, a sueldo del duque Orso, también es una forma excelente de hacer dinero. Sus victorias la han hecho muy popular —quizá demasiado para el gusto de Orso. Traicionada y dada por muerta, la recompensa de Murcatto es un cuerpo desfigurado y una sed de venganza que no se detendrá ante nada.



Guapa, calculadora, fría, y General del Ejército de las Mil Espadas actualmente al servicio del Duque Orso, Monzcarro Murcatto se pasa la vida saqueando ciudades, matando, traicionando y, sobretodo, sacando provecho de ello sin que la culpa le corroa. Junto a su hermano Benna, Monza va de ciudad en ciudad ganando terrenos para Orso, y que así de esa forma sea capaz de gobernar toda Styria. Pero la popularidad de Monza crece tan rápidamente como sus conquistas, y eso al Duque Orso no le gusta nada de nada, ya que Murcatto es una mercenaria, y como tal, puede cambiar de bando o matarlo cuando le apetezca. Eliminar todo obstáculo que se interponga entre él y su ascenso al poder es primordial para Orso, con lo que, junto a otros seis hombres el Duque decide acabar con las vidas de Monza y Benna y quitarse de ese modo posibles traiciones de encima.

Pero Monzcarro Murcatto sobrevive a toda la barbarie, sin que tal hecho llegue a oído de Orso... de momento, ya que Monza, o lo que queda de ella y no murió con Benna, quiere venganza: por ella y su cuerpo desfigurado, por su hermano, por la traición .

Valiéndose de los bajos fondos de Styria, Monza contrata a varios hombres y mujeres -prostitutas y mercenarios, envenenadores, enemigos y ex presidiarios- para llevar su plan cabo: matar a los siete hombres que acabaron con su vida y la de su hermano. 

Tiembla Edmundo Dantés.

Y llegados a este punto, ya te puedes hacer una idea de lo que te depara si te adentras en el mundo de Abercrombie. Si deseas amores imposibles, princesas desvalidas, inocencia, lealtad y caballeros tipo Rey Arturo aquí no lo vais a encontrar. Avisados estáis. 

La mejor venganza es un libro violento, cruel, sangriento rozando lo gore, con mucho politiqueo y falta de honestidad, donde lo que prima es el propio bienestar y el honor brilla por su ausencia.

Los personajes son ratas de alcantarillas, marginados de la sociedad con poco que perder y todo por ganar si acompañan a Monza en esta travesía de final incierto. Un guerrero venido del Norte llamado Caul Escalofríos, Amistoso, un ex presidiario con la manía obsesiva de contar todo, Morveer, el envenenador etc. no tienen nada en común, salvo una cosa: El dinero.

Lo interesante de los personajes de Abercrombie es que son tan egoístas y amorales que pocas son las veces en las que ves venir sus movimientos, salvo, quizás, a Escalofríos, que dentro de lo malo, es el "menos malo". Ya solo por eso, el autor es digno de alabanzas y mención. Cada hoja es un deleite para el lector, que sorpresa tras sorpresa ve como la trama se retuerce hasta crear un árbol lleno de nudos y con más vaivenes que un barco en medio de la tempestad. Sabes cómo son en líneas generales, lo que han llegado a hacer por dinero y poder, y por eso es difícil encontrar un límite entre lo que serán o no capaces de hacer en un futuro.  

Algunos traicionarán a Monza, y está los traicionará a ellos; otros intentarán matarse, y unos cuantos cambiarán de bando sin que se les rompa una uña. Y todos, uno por uno, aceptan los cambios, porque la vida es así de dura, y un día estás abajo de igual forma que al siguiente te encuentras en un palacio cenando con la nobleza. A quién le importa si tienes que confraternizar con el enemigo y lamer sus traseros, si esto te sirve para asegurarte veinticuatro horas más de vida, aunque no sepas qué va a ocurrir cuando estas se acaben. Ese es el lema, esa es la esencia de todos ellos.

Traidores y traicionados, asesinos y víctimas, amorales y volátiles, tanto Monza como el resto de sus compañeros conquistan al lector desde el lado más diabólico de la sociedad, haciendo que sientas empatía por ellos a ratos, mientras que otros tanto los odiarás. Pero si hay algo que destacar de estos personajes, es que te hacen tener dudas éticas.

Porque si algo aparte de lo evidente caracteriza La Mejor Venganza es sin lugar a dudas el debate moral de sus protagonistas. Monza busca venganza por la muerte de su hermano y la suya propia, sin importarle los riesgos que corra para terminarla, sin embargo, hay que tener en cuenta que Monza no es inocente: Murcatto mató a mujeres y niños, saqueó ciudades enteras, arrasó, aplastó y vendió a quién podía si con ello sacaba algo a cambio. No estamos frente a un Edmundo Dantes que busca justicia porque era inocente de los cargos. Estamos ante una mujer despiadada y cruel a la que no le tiembla la mano a la hora de empuñar una espada y degollar. Así, pues, ¿es justa la venganza de Monza? Esa es la pregunta que indirectamente Abercrombie hace al lector.

Como ya dije anteriormente, La mejor venganza tiene una trama con una base muy sencilla, pero que poco a poco se va complicando. Personalmente el modo de llevar la trama del autor me ha gustado a ratos, pero en otras casi no he podido con ella. La culpa la tienen dos puntos claves que fallan en el libro: El ritmo y la política. 

El ritmo es muy ágil al principio, pero decae con el paso de las hojas hasta llegar a un punto en que resulta aburrido en ciertas ocasiones. Las descripciones de las ciudades son muy extensas, las batallas son sangrientas pero se desarrollan con lentitud, por lo que pierden esa sensación de vértigo que producen al principio. Al estar escrito en tercera persona, el autor se explaya mucho con los personajes, en especial con Monza y Escalofríos, pero sus pensamientos llegan a resultar repetitivos hacia la mitad del libro. Solo los diálogos llenos de humor negro y los giros argumentales hace reflotar la historia cuando pierde fuelle. 

El tema de la política ha sido otro inconveniente. Hay demasiadas ciudades, numerosos frentes abiertos, y para el lector novel que no haya leído antes la trilogía en la que se basa el libro resulta un obstáculo difícil de solventar. Quizá si hubiesen puesto menos hincapié en ella, o tal vez más... pero el autor se queda a medias, como si diera por hecho que ya sabes todo lo que tienes que saber -que no es el caso- creando en el lector unas lagunas que hasta que no llevas un buen trozo del libro leído no logras entender todo el "percá".  

Nota:

La mejor venganza es una novela de fantasía épica original, con un ritmo inestable, a ratos aburrida y con excesiva política, pero también sangrienta y cruel, llena de acción y aventuras. Valiéndose de un ajuste de cuentas, Abercrombie pone al lector en jaque hasta el último aliento con sus giros argumentales, sus cruentas batallas, y la falta de honestidad de sus protagonistas. Bueno, pero no excelente.

La mejor venganza se publicó en España en Octubre bajo el sello de Alianza Editorial. Su precio es de 22.00 euros, y sí, es caro, pero con más dee ochocientas páginas, así que bien gastado está. Libro único, para variar.  

Y nada más.

¡Nos leemos frikis!

3 comentarios:

Beleth dijo...

Estaba esperando a leer alguna reseña para ver si hacía falta leerse la trilogía anterior para "entenderlo" bien y ya veo que sí :S lo de que el politiqueo sea excesivo y la lentitut me tiran un poco para atrás.

malcon dijo...

Hola, enhorabuena por el blog.
Me permito comentar que a mi no me gustó el libro. Las comparaciones son odiosas, pero después de la primera ley esperaba mucho más.
La saga me pareció buenisima.
Saludos.

numenor dijo...

Yo tengo una tercera edición de 2018 de Alianza (no la de la colección Runas sino la que tiene un impresionante dibujo de Gail Cross en la tapa). Pero la traducción, de Javier Martin Lalanda, es malísima y me extraña que nadie lo haya comentado a lo largo de todos estos años en ninguna reseña. Lalanda tiene un enorme desconocimiento del lenguaje coloquial o "slang" tan utilizado por un autor como Abercrombie. Esto lo lleva a traducir erróneamente muchas expresiones y muchos "phrasal verbs" cambiándole su significado, en muchos casos haciendo que frases enteras del libro (especialmente, pero no exclusivamente, en los diálogos) rechinen y resulten un tanto fuera de contexto. Por dar solo algunos ejemplos:
- cuando un personaje le contesta a otro «I know! I was thinking the same thing.» lo traduce como «¡Ya lo comprendo! Yo estaba pensando lo mismo», cuando quiere decir «¡Lo se! Yo estaba pensando lo mismo».
- «rely on», lo traduce como «confiar en», cuando quiere decir «depender de» (y en el contexto se nota)
- la expresión “That so?" (diminutivo de “It's that so?") lo traduce en mas de una ocasión "¿Y ya está?", cuando quiere decir "¿Es así?"
- “Some fucking chance of that!” lo traduce ”¡Pues que tengas una suerte bestial!”, cuando quiere decir "¡Como si hubiera una p...chance de eso!"
-“Stick your tiny mind to keeping things under control down here" lo traduce "Me gustaría que tu diminuta mente dejara de tener las cosas bajo control", cuando quiere decir "Mantén tu diminuta cabeza dedicada a mantener las cosas bajo control aquí abajo"
-“I will catch up with you!” lo traduce "Yo los pondré al día por ti", cuando quiere decir "Ya te alcanzo"
-“I wish it could’ve gone on forever” lo traduce "Me gustaría que hubiese terminado para siempre", cuando quiere decir
"Me gustaría que hubiese durado para siempre"
Hay gran cantidad de otros ejemplos a lo largo de todo el libro. Y por eso, insisto, me llama muchísimo la atención no haber encontrado a nadie mas refiriéndose a esto en todos estos años. Y de hecho, lo que resulta mucho peor todavía, Lalanda tradujo también Tierras Rojas del mismo autor.